domingo, 29 de junio de 2014

Capítulo 34.

Camina hasta llegar al Retiro. Aunque va con tiempo de sobra, no quiere llegar tarde y mucho menos, que Laura tenga que estar esperando.
Minutos después, llega al punto de encuentro con la chica. Ella aún no ha llegado.
Tiene planeado hablar seriamente con ella. Después de varios meses pensando, cree que es buena idea decirle a la chica todo.
-¡Dani!- Una voz le saca de sus pensamientos.
-¡Hola Laura!
-Siento haber tardado. Me he entretenido…
-No pasa nada, yo acabo de llegar.
-¿Seguro? No me estarás mintiendo para que yo no quede mal…
-Seguro. ¡Acabo de llegar!- Ambos se ríen.
-Me tendré que fiar de ti.
-Fíate de los rubios menos de Carlos.
-Pobre Carlos… No seas así con él. Jajajaja.
Empiezan a caminar mientras hablan. No saben exactamente adónde van. Pero un paseo, no les sienta nada mal.
Minutos después, deciden sentarse en el césped. Se han cansado de caminar.
-¿No podíamos sentarnos en un banco? ¡Que ya no estamos en verano!- Dani mira a la joven. La chica se empieza a reír y niega con la cabeza.
-El césped está blandito y el banco es de madera. Elige. Blandito o madera.
Fácil elección. Blandito.
Siguen hablando. Dani cree que luego sería buena idea invitarla a comer para hablar más tranquilamente.
El móvil de la joven suena interrumpiendo la conversación.
-¿Sí? ¿Ampy? ¿Qué pasa? ¡A ver tranquilízate! ¿Qué ha pasado? ¡¿Qué?! ¡Sí, vale, vale! Ahora mismo voy.- La chica finaliza la llamada y mira al joven que está sentado a su lado.- Dani, llévame al hospital.
-¿Qué ha pasado?- Ambos se levantan del césped y caminan hacia una de las salidas del Retiro.
-¡Te lo explico por el camino! ¡Corre!- La joven acelera el paso al igual que él.
Lo que parecía ser el comienzo de un buen día, empeora por momentos…


Dos horas en la sala de espera. Sin saber nada. ¿Tan grave ha sido? Caminan de un lado a otro con cierto nerviosismo. Aunque para nerviosismo, el que tienen los padres de las chicas.
-¿Familiares de Natalia y Clara?
-¡Sí!- Las madres de las chicas se acercan hasta el médico.
-¿Cómo están? ¿Están bien?- La madre de Natalia mira al hombre.
-Sí. Por suerte no ha sido tan grave. Pero me temo que deberán permanecer las dos ingresadas. Tenemos que hacerlas algunas pruebas.
-Pero, ¿qué las ha pasado?- Ampy, que se ha acercado junto a las dos mujeres, pregunta bastante interesada.
-Natalia tiene un esguince de primer grado, el peroné fracturado y algunos rasguños en los brazos. Y Clara se ha fracturado el cúbito del brazo derecho y dos falanges. Aunque no es tan grave como pensábamos, deben permanecer aquí.
-Ay madre mía… ¿Podemos pasar a verlas?- La madre de Clara, al igual que la madre de Natalia, tiene los ojos llorosos.
-Sí. Pueden pasar a verlas, pero recomiendo que pasen de cuatro en cuatro.
-Muchas gracias doctor.- El padre de Natalia estrecha la mano con el hombre.
-Entrar vosotros primero.- Marta mira a los padres de las chicas.- Las veremos más tarde.
El padre de Clara asiente con la cabeza. Segundos después, entran en la habitación.
-¡Ay mi niña!- La madre de Natalia abraza a su hija.- ¿Qué os ha pasado?
-¡Un gilipollas que se ha saltado el semáforo!- Clara suena realmente enfadada.
-Mira que te tengo dicho que tengas cuidado con el coche Clara.- El padre de la joven la mira.
-Clara no fue la responsable. Fue el idiota del otro coche.- Natalia suspira.- Pero estamos bien, que es lo importante. Un susto. Ya está.
-Hay que ponerle una denuncia.- El padre de Natalia mira a las dos chicas.- No podemos permitir que se quede sin una denuncia.
-Eso ya está solucionado. El coche es lo de menos, de verdad.- Clara esboza una ligera sonrisa.
-¿Cuánto lleváis esperando?- Natalia mira a su madre.
-Dos horas sin saber nada. Me alegra ver que amabas estáis bien.- La madre de Clara sonríe.
Ha sido un susto, solo eso. Ellas están bien y eso es lo que cuenta.


Llaman con los nudillos a la puerta de la habitación. Abren la puerta un poco y Álvaro asoma la cabeza.
-¿Se puede pasar?- Pregunta algo serio.
-Pues claro.- Natalia sonríe.
Blas y él entran y cierran la puerta.
-La madre que… ¡El susto que nos habéis dado qué!- Blas las mira a las dos.- ¿Se puede saber qué ha pasado?
-Blas, tranquilo.- Clara le mira.- Un imbécil. Eso ha pasado. Pero ya está. Estamos bien.
-No. Bien no estáis porque tú tienes el brazo escayolado y Natalia tiene la pierna escayolada. Eso no es estar bien.- Álvaro niega con la cabeza.- Y al imbécil ese se le debería caer la cara de vergüenza.
-¡Que estamos bien!- Natalia suelta una ligera carcajada.- Esto en un mes se pasa.
-Ya claro, en un mes.- Blas suspira.- Bueno, al menos seguís con el humor de siempre. Vaya dos.
-Eso siempre.- Clara se ríe.
-Sentimos no haber venido antes. Es un poco tarde, pero nos han llamado cuando estábamos fuera de Madrid.- Álvaro se disculpa. Son las ocho y media de la noche y lo primero que han hecho al llegar de nuevo a la capital es ir a verlas.
-No pasa nada, hemos descansado.- Clara sonríe.
-Sí, sobretodo tú. Menuda siesta.- Natalia mira a su amiga riendo.
-Lógico. Si queréis nos vamos y os dejamos descansar.- Álvaro mira a las dos chicas.
-No sería mala idea. No estamos diciendo que os marchéis, pero…
-No pasa nada. Es normal. Hace unas horas habéis tenido un accidente. Estaréis cansadas chicas.- Blas sonríe.- Mañana venimos a veros, ¿de acuerdo?
-Vale.- Ambas lo dicen al unísono.
La puerta se abre. Entran dos enfermeras con la bandeja de la cena.
-Aquí tenéis chicas, hasta luego.- Una de ellas las sonríe y sale de la habitación cerrando la puerta.
-Ay. No quiero. ¡Yo eso no me lo voy a comer!- Clara niega con la cabeza.
-Oh vamos. Tampoco tiene que ser para tanto.- Blas se ríe ante la reacción de la chica.
-¿No es para tanto? ¡Pero si ni siquiera lleva sal la comida!- Natalia también se niega a cenar lo que les han traído.- Además, no tengo mucho hambre.
-¿Nos vamos a tener que quedar aquí hasta que cenéis?- Álvaro se ríe.- Venga, a cenar se ha dicho.
-Álvaro, que yo no me voy a comer eso. Que no tengo hambre.- Natalia se ríe.
-Ay…- El joven suspira.- Bueno, al menos cómete el yogurt que te han traído. Que es de Danone, eso está rico.
-Bueno, pero solo el yogurt.- La chica accede.
-¿Yo que tengo de postre?- Clara pregunta curiosa.
-Natillas de vainilla.- Blas la mira.- ¿Tampoco te las vas a comer?
-Eso sí. Pero no puedo. ¡Estoy manca!
Los cuatro se empiezan a reír.
-Ahora me tocará darte de comer.- El moreno de los ojos claros sonríe.- Venga, ¡a comer!
-Ni se te ocurra. Que veo tus intenciones.- Clara le mira seriamente.- Dame las natillas.
Blas le da las natillas a la chica. Aunque ni ellos mismo saben cómo lo ha podido hacer, ha colocado las natillas de forma que no se le caigan.
-Y ahora con la izquierda yo como.- La chica sonríe.
-Rápidas soluciones de Clara. Como no…- Natalia mira a su amiga riendo.
Minutos más tarde, el horario de visitas les indica que se tienen que ir de allí. Se despiden de ella prometiendo que mañana volverán a verlas.




¡Muy buenas! En primer lugar LO SENTIMOS. Hemos tardado un montón de tiempo en subir un nuevo capítulo, pero entre lo exámenes finales y demás no hemos podido... Bueno, deciros que esperamos que la espera con este capítulo haya merecido la pena y esperamos algún comentario sobre qué os ha parecido.
Y por último deciros que paséis un buen verano y que muy pronto subimos otro capítulo, ¡muchos besos! Y de nuevo, sentimos haber tardado. @ClariitahM @Nataliasmiler_

jueves, 8 de mayo de 2014

Capítulo 33.

La curiosidad les empieza a matar a todos. ¿Qué ha pasado mientras estaban solos?
-¿Qué ha pasado?- Dani mira a David y después mira a Ampy.
-A ver… Hemos solucionado las cosas y bueno… Se podría decir que estamos juntos.- David se sonroja.
-¡Aleluya!- Natalia abraza a su amiga.- ¡Cuatro meses para esto!
-Jajajajaja, qué tonta eres…- Ampy la mira sonrojada.
-Bueno, que ya tenemos dos parejas. ¿La siguiente?- El comentario de Carlos hace que varias miradas se posen sobre él. Miradas no muy buenas…- Vale me callo.
-Sí, que estás así muy guapo.- Laura le tira de uno de los mofletes.
-¡Duele!- El rubio se queja.
-Bueno, que es la una y media de la mañana y creo que yo hasta Alcalá tengo una buena tirada.- Álvaro se levanta del sofá.
-Quédate en mi casa y mañana te vas.- Blas mira a su amigo.
-¡Vale! ¡Alguien que me adopta!- Esto les hace reír a todos.
-Pero sí, va siendo hora de que cada uno se marche a su casa.- Laura también se levanta del sofá.
-Pues yo no me quiero ir…- Natalia mira a Clara. La chica, que se ha dado cuenta de las intenciones de su amiga, se ríe.
-Anda. Quédate.- Clara se levanta del sofá para despedir a todos los demás.
Les acompaña a la puerta y se despide de todos con dos besos y algún abrazo.
-Ah, Blas.- La chica le mira sonriendo.- Gracias por ayudarme con el plan.
-No las des. Al final ha salido bien.- Se ríen.- Hasta mañana.
Salen todos de la casa y la joven regresa al salón junto con Natalia.
-Bueno, ¿duermes en la de invitados? O… ¿Montamos fiesta de pijamas en mi habitación?
-¡Fiesta!- Natalia salta del sofá y corre hacia el cuarto de su amiga. Se tira sobre la cama. Clara apaga todas las luces que hay encendidas en la casa y va a su habitación.
-Eso sí, luego tenemos nuestra charla de siempre.- Clara se ríe al igual que Natalia. Vaya dos.


Preparan el cuarto de invitados para que Álvaro pueda dormir allí. Tras esto, se dirigen al salón para ver un rato la televisión.
-¿Cómo te ha ido la tarde con Natalia?- Blas mira a su amigo.
-Bastante bien. La verdad que con ella no te aburres.- Álvaro sonríe.
-Venga Álvaro. No te hagas el tonto.
-¿Qué pasa?
-Que te gusta. Eso pasa. ¡Podríais estar juntos!- Blas le mira con una amplia sonrisa.
Álvaro suspira.
-Vale sí, me gusta. ¿Y qué? ¿Y si yo a ella no le gusto?- El chico se encoge de hombros. Seguro que en eso Blas no ha pensado.
-¡Cómo no le vas a gustar! Pasáis mucho tiempo juntos. Os lo pasáis bien. Y todo hay que decirlo, os gustáis mutuamente.- Blas suelta una carcajada.
-Bueno, lo de que pasamos tiempo juntos es verdad, que lo pasamos bien también. ¡Pero eso no prueba nada!
-Mira que eres terco. Como sigas así de negativo lo llevas mal.
-¡Habló! ¿Y tú con Clara?
-¡No me cambies de tema! Clara no viene al caso.
-¡Pero te gusta! ¡Y no te das cuenta de que le gustas!- Álvaro contraataca.- Debo decir lo mismo. Pasáis mucho tiempo juntos.
-¿Y qué? Me verá como un hermano.- Blas se queda pensativo.
-Claro… Por eso tantas indirectas que te lanza. ¡Será por algo! Y no porque te vea como un hermano precisamente. Acuérdate la noche de la fiesta.
-¿Ya estamos con la fiesta? ¡Que no pasó nada! Que aclaramos todo y como amigos. Ya está. Y lo dicho. O te aclaras con Natalia o mal vas.
-O te aclara tú con Clara o mal vas.- Álvaro suelta una carcajada.- Ahora en serio. Entre Natalia y yo no hay gran cosa…- El chico se queda callado por unos segundo mientras piensa. No hay nada. ¿O sí?
-Pues si entre Natalia y tú no hay nada, menos hay entre Clara y yo.- Blas finaliza con la conversación.
Ambos se quedan en silencio mientras miran la televisión. ¿Realmente no hay nada con las chicas?


Habla por teléfono con Dani a pesar de que se ha visto hace media hora.
-¿Mañana no tienes nada que hacer?- Dani pregunta al otro lado.
-No. Absolutamente nada. ¿Por qué?- Laura se muestra curiosa.
-Por si te quieres venir a dar una vuelta por El Retiro. ¿Te parece buena idea?- El chico suena bastante ilusionado con la idea.
-¡Sí! ¡Por mí perfecto!
-Vale, entonces paso por tu casa a las doce.- Dani concreta la hora para quedar.
-Muy bien.- Laura sonríe. Bosteza. El cansancio se empieza a notar.- Dani, me voy a la cama. Buenas noches.
-Buenas noches Laura, descansa.
Cuelga. Deja el móvil sobre el escritorio y se tumba en la cama. Mañana va a ser un buen día... Aunque todo puede torcerse...



¡Buenas! Pues aquí os dejamos con un nuevo capítulo de la novela. ¡Sentimos tardar tanto en subir pero apenas tenemos tiempo... Bueno en primer lugar os queríamos preguntar: ¿Qué os esperáis que pase en el próximo capítulo? Y lo segundo: ¡comentar lo que penséis! Ya sea por Twitter o por el blog. Y nada, ¡esperamos subir dentro de poco el siguiente capítulo. Att: @ClariitahM @Nataliasmiler_

viernes, 11 de abril de 2014

Capítulo 32.

Ampy y David siguen cenando en silencio… Está claro que sus amigos no van a volver. Ampy acaba de cenar a toda prisa y coge su chaqueta.
-¡Espera! ¿Dónde vas?- David la mira preocupado.
-A mi casa. Despídete de los chicos por mí.
-Ampy… - La coge del brazo – No podemos seguir así. ¿Me puedes contar ya que te he hecho? ¿Qué he hecho mal? ¿Qué he dicho? ¡No puedo seguir pensando todos los días donde habré fallado!
-David, no digas eso… No eres tú, soy yo.
-Claro, la típica frase que se usa cuando no se tiene que decir – David empieza a cabrearse. - ¿Por qué desde ese día nada es igual? ¿No te gusto? ¡Pues dímelo y sigamos como amigos!
-Si me gustas… - Dice susurrando. Tan bajo que David ni la escucha.
-¿Qué dices?
-Que… Que me tengo que ir, David.  – Ampy intenta abrir la puerta. Está cerrada… Clara ha cerrado la puerta con llave. Mientras David sonríe, ella vuelve a intentar localizar a Clara. Apagado. Suspira y se sienta en el sofá.
- Va, cielo, no pongamos las cosas más difíciles… Siéntate aquí conmigo y hablemos como personas adultas que somos y me lo cuentas. ¿Vale?  - Le sonríe y le tiende la mano.
 Ampy rompe a llorar y David se levanta rápidamente a abrazarla. Ha hecho justo lo que no quería. Hacerle sufrir, pero… Es hora de contárselo.


En el restaurante ya van por el postre
-Chicos, yo creo que tendríais que ir yendo.- Álvaro mira a Clara y a Blas.
- A lo mejor Ampy ya se ha ido, no creo que haya aguantado mucho ahí. – Blas se empieza a reír.
-Clara… No habrás cerrado la puerta con llave… ¿verdad? – Todos ríen por el comentario de Natalia.
- Está bien, encenderé el móvil a ver si tengo llamadas perdidas. –  Clara saca el móvil, lo enciende, pone el pin… 10 llamadas perdidas. La sonrisa se dibuja de su rostro.
-Clara, ¿qué pasa?- Laura mira a su amiga.
-Tengo 10 llamadas perdidas, será mejor que vaya ya. – Coge su bolso y se va.
- Voy con ella, chicos. – Todos asienten y Blas corre tras ella con los abrigos.
-A lo mejor no ha sido muy buena idea…- Marta se lamenta.
- La que se va a liar.- Laura también lamenta aquel plan.
- No os preocupéis, todo ha salido bien.- Álvaro sonríe.
-¿Cómo lo sabes?- Natalia le mira.
-Por intuición… y por un mensaje de David.
Todos  ríen ya relajados. Ahora solo falta esperar a que ellos cuenten lo demás.

Clara llega a su casa, abre rápidamente y pasa al salón preocupada. Allí ve a Ampy y a David hablando y riéndose tranquilamente.
- ¡A ti te quería yo ver! – Ampy la mira riendo
- No nos matéis… Que lo hemos hecho con buena intención eh. – Blas se ríe mientras mira lo contento que está David.
- Además, creo que nos ha salido bien el plan, ¿no? – Clara ve cómo Ampy se pone roja.
- Gracias, chicos. Os debo una.– Clara le da un fuerte abrazo a la chica y los 4 se sientan en el sofá.
- ¿Os traigo algo?- Blas pregunta educadamente.
- ¿Eso no lo tendría que decir yo? – Todos ríen ante el comentario que hace Clara. Blas trae 3 coca colas y 1 agua y siguen hablando.
- ¿Y qué habéis hecho en este rato?- Ampy siente curiosidad.
- Cenar en un restaurante con los demás chicos y las chicas. – David se ríe.

- Pues invítalos a tomar algo, ¿no? ¡Así nos vemos todos!- Clara hace lo que le ha dicho David y envía un mensaje por el grupo de las chicas. Al momento responden todas, van de camino y los demás también vienen. Es hora de celebrar que el plan ha salido bien.


¡Buenas! ¡Subimos nuevo capítulo! Aunque en el anterior no hay diez comentarios, varias chicas nos dijeron que subiéramos el siguiente capítulo y bueno, ¡aquí lo tenéis! Esperamos que os guste. Att: @ClariitahM y @Nataliasmiler_

sábado, 29 de marzo de 2014

Capítulo 31

Llaman al timbre de la casa.
-¡Clara! El timbre.- Una voz proveniente del salón eleva el tono de voz.
-Pero mira que eres vago.- La chica se asoma para dedicarle la peor de las miradas a Blas.
-Eh, es tu casa…- El chico suelta una carcajada.
Clara se acerca hasta la puerta y mira por la mirilla. Abre al comprobar que es David quien ha llamado al timbre. Abre.
-¡David!- La joven le saluda con un fuerte abrazo.
-Hola enana. ¿Tú no habías quedado con los demás? ¿Cómo que me has llamado?- David pasa al interior de la casa y deja su chaqueta en el perchero que la joven tiene en la entrada.
-Al final no salgo. Está Blas en el salón.
David se empieza a reír cuando escucha eso.
-Clara… Clarita.- Más risas. La chica le pega un codazo y pasan al interior del salón.
-¡Buenas!- Blas le saluda animadamente.
-Chicos, voy a la cocina. Que la pizza está en el horno.- Clara sale del salón y entra en la cocina. A la pizza la quedan aún diez minutos para estar lista.- ¿Queréis algo de beber?- Eleva el tono de voz para que la puedan escuchar.
-¡Una Coca-Cola!- David también eleva el tono de voz.
-¡Yo no quiero nada!
La joven coge la Coca-Cola de la nevera. Aunque no la gustan las bebidas con gas, sabe que a sus amigos sí. Sale de la cocina en dirección al salón.
El timbre vuelve a sonar. Mira a Blas, cómplice del plan, y se dirige a abrir. Ampy está tras la puerta.
Se saludan con un abrazo y la chica deja sus cosas en el perchero de la entrada. Pasan juntas al salón. La cara alegre de Ampy cambia por completo.
-Hola.- Saluda algo desanimada.
-Hola Ampy.- David mira a la chica con una ligera sonrisa.
-¡Buenas Ampy!- Blas se levanta del sofá y la saluda con dos besos. David imita a su amigo, aunque los dos besos que se dan son algo secos.
-Voy a la cocina, la pizza ya estará.- Clara se adentra en la cocina y saca la pizza. La coloca sobre la mesa de la cocina. Regresa al salón con la excusa que tenía planeada.- No me quedan más bebidas en la nevera. Blas, ¿me acompañas a la tienda que hay abajo?
-Sí, claro.- Blas la mira. Coge la chaqueta que traía. La joven coge el bolso y guarda su móvil y las llaves de casa.
-Ahora subimos. Ir comiéndoos la pizza que se queda fría. ¡Está en la cocina!- Tras decir esto, Blas y ella salen de la casa dejando a Ampy y a David a solas.
El plan se pone en marcha.

Caminan por la calle para llegar al restaurante en el que han quedado con todos.
-¿Tú crees que hemos hecho bien?- Blas la mira riendo.
-No sé. Y me empiezo a preocupar. Jajajaja.- Y pensar que luego Ampy la matará…- Mira, ya están en la entrada.
Caminan algo más deprisa hasta llegar a la entrada del restaurante. Saludan a todos y deciden entrar.
Un camarero les lleva hasta una mesa en la que puedan estar los ocho.
-Bueno, qué. ¿Cómo ha ido?- Laura, que se ha sentado al lado de Dani, mira a Clara y después a Blas.
-Bien… Aquí la pitufa ha puesto la excusa de que no había bebidas en la nevera y que teníamos que bajar a comprar.- Blas se vuelve a reír. Esta vez, ríen todos.
-Menudas ideas. Ampy nos va a querer matar…- Natalia se encoge de hombros.- Pero tenían que solucionarlo. No puede pasarse la vida evitando a David. A demás. ¿Por qué le evita?- La joven mira a los presentes.
-Eh… Bueno… David hace mes y medio se le declaró.- Dani cuenta lo que él sabe.- Y Ampy le dijo…
-Le dijo que no estaba preparada para una relación.- Laura termina de contarlo.
-¡Pero si parece que están hecho el uno para el otro!- Álvaro se ríe.
-Pues claro que lo están.- Marta también se ríe.- Al igual que algunos de aquí…- Esto lo dice en voz baja. El único que lo llega a oír es Carlos. El joven se empieza a reír escandaloso.
-¿Qué le pasa a este?- Álvaro mira a su amigo.
-Nada, que es tonto.- Marta le da un manotazo.
-¿Cómo que tonto? ¡Un respeto! ¡Que soy tu novio!- Carlos pone morritos. Todos se ríen de la escena que están montando.
-Anda tortolitos, dejar esas peleas.- Clara suelta otra carcajada.
-Clara, Blas. Yo que vosotros, apagaba los móviles. Que lo mismo os llaman porque estáis tardando.- Natalia les mira a los dos.
-¡Es verdad!- La chica saca su móvil y lo apaga. El joven hace lo mismo que la chica.
-Bueno, pidamos la cena que empiezo a tener hambre.- Carlos llama al camarero.
Quince minutos más tarde, ya están todos cenando.

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¡Hola a todos! Una vez más GRACIAS por leer nuestra novela y por vuestras opiniones. Esta vez os proponemos un reto. Sabéis que nosotras subimos capítulo más o menos cada semana. Pues esta vez, si encontramos 10 comentarios en esta entrada DE DISTINTA GENTE pidiéndonos que subamos antes, lo haremos! Muchas gracias por vuestro apoyo y no dudéis en comentar! Att: @ClariitahM @Nataliasmiler_


viernes, 14 de marzo de 2014

Capítulo 30.

Suena el teléfono. Él otra vez. Decide no cogerlo. ¿Pero qué le pasa? ¡Si todo iba genial! Todo cambió aquel día… Se sumerge en sus pensamientos, pero eso le dura poco ya que no tarda en sonar el timbre.
- Ampy abre, que sé que estás ahí – Ampy sigue callada, no le apetece ver a nadie. Se sienta en el sofá… Vuelve a sonar el timbre, una vez, otra vez…. No va a conseguir que se vaya así que abre la puerta.
En la puerta está Clara con una tarrina de helado de chocolate.
- ¿Por qué no me abrías? – Dice Clara entrando en el salón
- No me había enterado –Miente. Las dos lo saben, pero prefieren dejar  el tema de lado.
- Ampy… No puedes seguir así. ¿Cuándo nos lo vas a contar?
- ¿Qué quieres que te cuente? –Dice con una sonrisa fingida.
- ¿Qué ha pasado con David? ¿Por qué estás tan distante de él? No le dejas entrar, no le coges el teléfono, no vas a ningún sitio con nosotros… ¿Tan grave es lo que te ha hecho? ¿Por qué estás enfadada con él?
- ¡Cómo voy a estar enfadada con él! ¡Eso es imposible! – Clara mira a su amiga desconcertada, no entiende el por qué está así su amiga. Empieza a pensar y se le viene una idea a la cabeza.
- Bueno Ampy, yo me tengo que ir. ¿Quedamos esta noche y nos comemos un helado viendo una película? ¡Que ni lo hemos tocado! – Las dos se ríen y Ampy asiente. Clara le da dos besos y sale de su casa.
‘Chicas, ya tenemos plan para esta noche. ¿Preparadas? Vamos a descubrir que le pasa a Ampy. Llamar a David, lo necesitaremos en mi casa’ – Revisa su mensaje antes de enviarlo. Es un buen plan, no puede fallar.


Es el último concierto de este mes, van a pillarse unas pocas vacaciones.
- ¡Muchas gracias, público! – Dice Álvaro mientras se va del escenario.
Van a los camerinos a cambiarse de ropa y comer algo, están hambrientos y muertos de cansancio.
- Bueno chicos, ¿qué planes tenéis para estas vacaciones? – Comenta Dani mientras se come un bocadillo.
- Había pensado en que podríamos quedar con las chicas, seguro que quieren. Podríamos… - Carlos se calla al instante al ver la cara de David. Se había olvidado por completo.
- ¿Y tú que vas a hacer, David? – Dice Blas alegre intentando cambiar de tema.
- Quedarme en casa descansando, será lo mejor – Todos se quedan callados mientras comen hasta que Álvaro recibe un mensaje.
- Chicos, es Natalia. Dice que si nos vamos a cenar con ella y las chicas esta noche
- Claro – Dice David. Así intentará hablar con Ampy una vez más.
- No, tú no puedes venir – Dice Álvaro riéndose
- ¿Por qué no?  - Pregunta Blas.

- A él le esperan otros planes. – Todos se quedan pensativos mientras Álvaro responde a Natalia.  El plan sigue en marcha.



¡Muy buenas! Sentimos no haber podido subir capítulo durante este tiempo pero en recompensa subimos dos. Gracias por todos los comentarios que nos dejáis tanto por aquí como por Twitter. Y bueno, deciros que este es el último capítulo de la primera temporada. Pero continuaremos con la segunda. ¡Esperamos que os guste! Att: @ClariitahM @Nataliasmiler_


Capítulo 29.

Entran en las respectivas habitaciones y dejan las maletas. No tienen tiempo de colocar nada.
-Venga chicos, que tenemos que bajar a comer…- Magí llama a las puertas de ambas habitaciones.
-¡Ya vamos!- Álvaro eleva el tono de voz. Coge su móvil y su cartera. Ya está. Sale de la habitación junto con Blas y Carlos.
-Venga. Que vamos con prisas. Tenemos que comer, ir a una entrevista e ir a la prueba de sonido. Y la entrevista es en una hora.- Magí les mira.
-¿Tan pronto? ¡No nos da tiempo!- Carlos mira la hora en el móvil.
-Por eso mismo, vamos a comer anda.
Bajan todos al comedor. Dani y Álvaro esperan sentados en una mesa mientras que los demás van a por la comida.
Acaban de llegar y ya llevan prisas…


Ambas bailan al ritmo de “Call me maybe”. La diferencia es que Laura baila con la escoba, ya que estaba barriendo.
-Laura deja la escoba anda…- Marta mira a su amiga riendo. A ella no le importa, la escoba es su pareja de baile en estos momentos.
-¡And this is crazy!- Laura canta el estribillo de la canción como si le fuera la vida en ello.
-Madre mía…- Marta se sienta a disfrutar del buen espectáculo que tiene en su casa.
-Ah no… De eso nada.- Laura coge la fregona y se la da a la joven.- Tú también bailas. A mí me dejes sola.
Marta se levanta del sofá y coge la fregona. Se mueve de un lado a otro por el salón. Finalmente, ambas corean el estribillo de la canción. Fin del baile.
-Tendrías que bailar así delante de Dani. Seguro que le haría ilusión.
-Seguro que se reiría, qué narices. Jajajajaja.- Las dos amigas se empiezan a reír.
Terminan de recoger el salón. La canción ha cambiado a una de Malú. “Blanco y Negro”. Esta, al ser más lenta, las da la opción de intentar bailar un vals en compañía del material de limpieza. Unos bueno compañeros de baile que son. Claro que sí.
-¡Te regalo mi amor, te regalo mi vida!- Las dos cantan al unísono. El ‘gran’ baile se ve interrumpido por una llamada que recibe Laura. Mira la pantalla del móvil y sonríe. Es Dani.
-¡Buenas!- La chica le saluda animadamente.
-¡Hola enana! ¿Qué tal por Madrid?
-Bastante bien, de limpieza general… Jajajaja.- La joven se empieza a reír.
-¡Mentira! ¡Está bailando con la escoba!- Marta eleva el tono de voz para que Dani pueda oírla.
-Jajajajajaja, ¿en serio?- El chico se empieza a reír.
-Bueno… Yo que tú no la hacía caso. Los vapores de la fregona son malos. Muy malos.- Ambos se ríen.
La conversación dura un buen rato más hasta que Dani se empieza a despedir.
-Bueno, te tengo que colgar. Tengo una entrevista. ¡Luego hablamos! ¡Besos!
-¡Besos Dani!- Laura finaliza la llamada y vuelve a dejar el móvil sobre la mesa.
-¿Qué te decía?- Marta siente mucha curiosidad.
-No gran cosa…
-Claro, claro…
-Jajajaja, anda. Pon la radio otra vez…
Marta hace caso de su amiga y vuelve a poner la radio.


Han decidido quedar todas. Van a pasar una tarde juntas. Están las cinco en casa de Ampy.
-¿Qué habéis hecho hoy?- Natalia mira a sus amigas.
-Hablar de bastantes cosas…- Clara sonríe.
-Bailar con el material de limpieza.- Laura ve que las miradas de Natalia, Clara y Ampy se posan sobre ella.- No preguntéis.
-Jajajajaja, no ahora en serio. ¿Con qué habéis bailado?- Natalia mira a sus amigas.
-Con la fregona y la escoba. Lo normal cuando haces limpieza.- Marta sonríe orgullosa.
-Vale… Creo que ese tema lo vamos a dejar aparte…- Clara se controla la risa.
-Sí, mejor, mejor.- Laura se empieza a reír.
-¿Qué hacemos? ¿Salimos a dar una vuelta?- Ampy propone una idea.
-Puf… No me apetece nada salir…- Marta niega con la cabeza.
-A mí tampoco sinceramente. No sé por qué lo he dicho.- Ampy suelta una carcajada.
-¿Vemos una película?- Natalia sonríe.
-Vale, ¿cuál?- Clara se levanta y se acerca hasta el estante en el que su amiga tiene las películas.
-¿Tienes la de “Grease”?- Natalia mira a Ampy. Ella niega con la cabeza.
-Es Clara quien tiene la película. Yo tengo algunas de miedo, de risa… Y la mayoría son todas de amor…- La joven se encoge de hombros.
-Pues una de risa, anda.
-¿El sueño de mi vida?- Clara saca la carátula de la película.
-¡Vale!- Marta asiente con la cabeza.

Ya tienen plan para esta tarde.

viernes, 21 de febrero de 2014

Capítulo 28.

Son las once de la noche. Va siendo hora de marcharse a casa. Empiezan una semana repleta de conciertos.
-Entonces que me aclare.- David mira a las chicas.- Venís al  Valencia y al de Murcia, ¿no?
-Y al de Madrid, que es el sábado. A ese también vamos.- Ampy sonríe.
-Pues al final nos vais a hacer compañía, sí… Jajajaja.- Carlos, que lleva a Marta de la mano suelta una pequeña carcajada.
-Bueno, nosotras nos vamos por aquí.- Natalia señala un de las calles. Ella junto con Ampy y Clara se empiezan a despedir.
-Buena suerte mañana.- Natalia le da dos besos a Álvaro.
-Muchas gracias. Os vemos el miércoles.- El joven la da un pequeño abrazo.
-¡Adiós!- Clara lo dice en voz alta para que todos la oigan.
-¿No te despides de mí?- Blas la mira. ¡No se ha dado ni cuenta! La chica se acerca hasta él y de la un abrazo.
-Ahora sí.- La chica sonríe.
-Sí, buenas noches pitufa.- El chico la dedica una sonrisa.
Después de esto, las tres se marchan por dónde tienen que irse y los demás siguen por otra de las calles.


Hablan por WhatsApp sobre el buen rato que han pasado esta tarde. No ha estado nada mal.
-No me imaginaba que terminarían juntos.
-Yo me hacía una ligera idea…- Natalia responde a la contestación de Álvaro.
-¿En serio? Eres adivina. Jajajaja
-Puede ser… Puede ser… Jajajaja vale, no.
-Jajajaja, me gustaría repetir la tarde. Ha estado bastante bien. Pero creo que la próxima ve iré en el equipo de Dani…
-¡Me ofendes! ¡No hemos jugado tan mal! Jajajaja
Natalia a pesar de no estar viendo al chico se ríe. Esta conversación la está animando bastante la noche.
-Jajajajaja ya bueno… ¡Pero igualmente hemos perdido!- Álvaro lo sigue recordando.
-… jajaja no digo nada.
-Mejor. Jajaja, bueno enana, creo que me voy a ir a dormir. Mañana madrugo bastante y no quiero parecer un zombi… ¡Buenas noches!
-¡Buenas noches Alvarito! ¡Descasa!- La joven envía el último mensaje que da por finalizado la conversación de más de una hora.
Decide dejar el móvil sobre la mesilla e intentar dormir. Ya son las doce y media. Aunque mañana no tiene nada que hacer, empieza a tener sueño.
Apaga la luz de la lámpara de noche y se tumba en la cama.  Piensa en los últimos días. Han pasado bastantes cosas, hace unos días Ampy y Clara trataban de saber quiénes eran esos chicos. Ahora se juntan con ellos. Ahora, uno de ellos es el novio de Marta. Todo ha pasado muy deprisa. Tan deprisa… Que las cosas pueden cambiar bastante…


Doce de la mañana. Aún les quedan dos horas para llegar a Barcelona. Carlos y David han empezado a jugar al ‘Veo veo’. Blas se ríe con la escena. Parecen dos niños pequeños.
-¡Veo, veo!- Carlos empieza a gritar. No sabe por qué, pero el eleva el tono de voz.
-¿Qué ves?- David mira a su amigo.
-Una cosa que empieza por la letra… ¡M!
-¿Mochila?
-No.
-¿Música?
-No, no.
-¿Maleta?- El chico no tiene muchas ideas sinceramente.
-¡Bien!
-¿Maleta? ¿Dónde ves tú la maleta Carlos?- Dani mira a su amigo. El chico se gira del asiento y señala la maleta de Álvaro que va debajo de los pies de este.- Anda. ¿Qué hace ahí la maleta?
-Es que no me apetecía guardarla en el maletero…
-Luego me decís a mí que soy vago…- Carlos se cruza de brazos.
-Carlos, es que lo eres.- Blas mira a su amigo. Ambos se empiezan a reír.
Parece que David y Carlos se han cansado de jugar. Van concentrados en la música que se escuchar por la radio. En realidad, todos se centran en la música.


Cambia de canal hasta llegar a la conclusión de que hoy no hay nada que ver en la televisión. Es domingo y sinceramente, no hay nada interesante en ningún canal.
El timbre de su casa suena. Se levanta del sofá y se dirige a la puerta. Abre.
-¡Buenas!- Clara está en el rellano sonriente.
-Ya tardabas en aparecer… Jajajaja.
-¿Me estás diciendo que soy una acoplada?- Clara ve como Ampy se toma unos segundos para poder contestar.- Vale sí. Me has pillado. Pero es que no tengo nada que hacer. Además, necesito hablar con alguien.- La joven entra en la casa de su amiga.
-Vamos al salón anda.- Las dos chicas entran al comedor y se sientan en el sofá.- ¿Quieres algo de beber?- Ampy mira a su amiga.
-Agua.
-Ahora vengo.- Ampy se vuelve a levantar del sofá y se dirige hacia la cocina. Saca la botella de la nevera y dos vasos. Sirve un poco de agua y regresa al salón junto a su amiga.
-Gracias.- Clara bebe un trago de agua y deja el vaso sobre la mesa.
-Tú dirás. Luego te cuento yo algo…
-Vale. A ver… Ayer cuando Blas se quedó en mi casa a comer estuvimos hablando. Me dijo que había alguien que le gustaba pero no estaba seguro…
-Ya creo saber por dónde vas… Lo primero… Blas te gusta, ¿verdad?- Ampy ve como su amiga asiente con la cabeza.- Y lo segundo… ¿Sabes quién es la chica?
-No. Pero estoy segura de que no soy yo. Me acaba de conocer… Dejemos el tema… ¿Qué me tienes que contar a mí?- Clara mira a su amiga.
-¿Recuerdas el problema de la discoteca?- Ampy mira a Clara. La chica asiente con la cabeza.
-Bien. Uno de los chicos es mi exnovio.
Clara se queda pensativa. ¡Con razón uno de ellos le sonaba tanto!
-¿Ha pasado algo más aparte de lo de la discoteca?
-No. Y prefiero que sea así. Empiezo a estar hecha un lío...



¡Buenas! Os dejamos otro capítulo de la novela. En primer lugar como siempre, os damos las gracias por leer la novela y comentar. Nos hace mucha ilusión recibir comentarios, de verdad. Y en segundo... Queda poco para que termine la primera temporada de la novela... ¡Pero habrá otra!
¡Besos! :)
Att: @Nataliasmiler_ y @ClariitahM